martes, 5 de octubre de 2010

Buenos días

Gracias mi Dios, gracias por regalarme un espectacular óleo celestial esta mañana. Me das los buenos días con sólo alzar mis ojos. Gracias por la paz que me das al dejar atrás a mi familia bajo tu protección, en tus fuertes manos. Gracias mi Señor por este rico café, cálido en mi garganta y en mis primeros pensamientos. Y con estos días, y como dice esta canción, gracias por tus besos con cada gota que me moja al andar. Gracias Jesús por iniciar mis días conmigo…

No hay comentarios: