Estás justo junto a mi Everest, tal vez el mismo o el camino entre los dos
Dónde estás Dios para que ni éste sea grande
Hazme recordar que este cielo es un principio donde las puntas de tus dedos bastan un delicado desliz
No quiero mi tinta vana sobre esta blanquísima cascada
Tu rojo solo ondea, el de nadie más. Que sea el sello escondido en el río de sed… para qué el deslumbrante que cuando llueve no brilla de nuevo jamás
Qué cansado es este mirador, más vacío que el pozo abismal
Por eso canta Señor; que canten tus cielos y firmamentos
Cánticos de vida
Cánticos de verdadera esperanza
Alabado Tú, alabado Tu Nombre retumbe en ecos por toda la tierra
Que esta pluma se llame muerta, y esta tinta espero que algún día también
1 comentario:
Me hizo recordad parte del canto "Oh amor de Dios"
Si fuera tinta todo el mar, y todo el cielo un gran papel,
Y cada hombre un escritor, y cada hoja un pincel.
Nunca podrían describir el gran amor de Dios.
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